Las Minas de Highlands
Nunca tuve muy claro por dónde se entraba a la mina
Tan sólo recuerdo esta cabaña y la historia de que la Abuela Lunardi subía todas las mañanas cargada con mendrugos de pan, agua caliente y una sábana blanca
Nunca tuve muy claro por dónde se entraba a la mina
Tan sólo recuerdo esta cabaña y la historia de que la Abuela Lunardi subía todas las mañanas cargada con mendrugos de pan, agua caliente y una sábana blanca
Orquestado por Vasco Lunardi a las 21:06